Chaco

CHACO: Hospital Perrando: Salud Pública Rehabilitó El Refaccionado Consultorio De Seguimiento De Prematuros De Alto Riesgo Y Patologías Complejas

El Ministerio de Salud Pública del Chaco inauguró las refacciones y rehabilitó el consultorio de seguimiento de prematuros de alto riesgo y patologías complejas del servicio de Neonatología del Hospital Dr. Julio C. Perrando. El equipo brinda atención médica, estimulación temprana, fonoaudiología y kinesiología haciendo foco principalmente en el neurodesarrollo de las y los pacientes.

El seguimiento a prematuros y pacientes con patologías complejas permite detectar y tratar de manera temprana cualquier problema de desarrollo. El objetivo es minimizar las secuelas y discapacidades futuras de los pacientes mediante un seguimiento e intervención temprana. La atención se realiza mediante turnos y también se ofrece apoyo a las familias y la preparación para el alta del bebé prematuro.

“Se trata de un espacio de referencia provincial que recibe derivaciones de todo Chaco e incluso de provincias vecinas”, indicó Alejandra Rodríguez Etchard, médica pediatra a cargo del Consultorio. Además agregó que no solo se atienden prematuros sino también a pacientes que hayan tenido patologías complejas, como algunos mielomeningoceles, patologías neurológicas o quirúrgicas.

De este modo la cartera sanitaria fortalece en la provincia las acciones relacionadas al Plan Nacional 1000 días, cuyo objetivo es la atención y cuidado integral de la salud durante el embarazo y la primera infancia. Este Plan reconoce la gestación, el nacimiento, la crianza y el cuidado de niñas y niños como una responsabilidad pública, comprometiendo a las distintas áreas y niveles de gobierno en una acción conjunta, bajo una mirada integral de cursos de vida y con perspectiva de derechos.

Referencia provincial

En el Perrando nacen aproximadamente 760 y 800 bebés prematuros al año y, de ese total, un 11 por ciento son prematuros extremos (bebés con menos de 30 semanas de gestación o menos de 1.500 gramos de peso).

La prematuridad es una de las causas de mayor morbi-mortalidad en recién nacidos, inclusive en la primera infancia, así que son bebés que tienen una alta complejidad al nacer, sobre todo los de condición extrema que nacen con menos de 1.500 gramos, por eso cuando son dados de alta requieren un seguimiento para evaluar e intervenir tempranamente u oportunamente y minimizar secuelas a futuro”, señaló Etchard.

Las patologías más comunes son las relacionadas al neurodesarrollo. “Todos estos bebés prematuros que han atravesado patologías muy complejas tienen posibilidades de tener dificultades o incapacidades, por ello, el seguimiento y diagnóstico precoz permiten intervenir de manera temprana para minimizar las secuelas que tengan a futuro”, recalcó y aseguró que esto disminuye la necesidad de intervenciones futuras.

Preparación para el alta

La profesional también hizo hincapié en la labor del consultorio en lo referido al apoyo a las familias y la preparación para el alta del bebé prematuro. “Son bebés que nacen y están dos meses o más internados, con mucha complejidad, donde las mamás solamente los atienden, los bañan, pero siempre dentro de una incubadora, cuando el paciente va a egresar o tener el alta hospitalaria, la mamá se siente muy desprotegida y con temores. Por eso se trabaja en la internación conjunta para prepararlas para el posterior alta, saber que cuentan con el consultorio las hace sentir contenidas y seguras”, resaltó.

Control del desarrollo

Alejandra Pereira, estimuladora temprana del equipo de Control del desarrollo del consultorio donde se busca detectar dificultades en el desarrollo infantil y derivar al paciente para la atención. “Intervenimos a partir del alta que le dan las pediatras en el servicio de mamá canguro, del servicio de Neonatología”, relató.

En su área se trabaja con una herramienta de observación del desarrollo. “Las madres vienen con sus bebés y, a través del Instrumento de Observación del Desarrollo Infantil (IODI), registramos todo lo que hace en las distintas áreas: en el lenguaje, en lo social, en la parte motora”, detalló.

“Esta técnica permite también que a través del juego podamos ver el vínculo, trabajar con los papás o referentes afectivos para estimular a ese bebé y, en caso de que haya alguna dificultad, se deriva al niño al centro de estimulación temprana”, concluyó.