En el marco de la última reunión de las comisiones técnicas de la Mesa Nacional Algodonera, en la localidad chaqueña de Resistencia, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) insistió en la importancia de cumplir con las fechas de destrucción de rastrojos de algodón establecidas para cada provincia y con el vacío sanitario de 90 días sin cultivo, medidas indispensables para controlar al picudo del algodonero.
Julio González, del Centro Regional Chaco-Formosa del Senasa, explicó que la red de monitoreo instalada en toda la zona algodonera está compuesta por 1800 trampas para picudo y los técnicos realizan al menos 3 visitas al mes para relevar información. “Debido a las condiciones climáticas caracterizadas por la intensa sequía, al inicio de la campaña hasta fines de febrero no se registraron capturas de picudo importante. En el mes de marzo aumentaron levemente y en abril con el rebrote del cultivo puede observarse actividad de la plaga tanto en lotes como en trampas, por la oferta de pimpollos en lotes y en trampas por la defoliación y cosecha de los lotes”, agregó.
“Para no elevar el número de capturas es indispensable que el productor cumpla con las medidas culturales establecidas para el control de la principal plaga algodonera. Por empezar, que se respeten las fechas límite para la destrucción de rastrojos de algodón una vez cosechado el cultivo y se deje un vacío sanitario de 90 días (sin cultivo en pie), esto le quitará al picudo los alimentos y el lugar en donde vive y permitirá la muerte natural del insecto”, señaló González.
A su turno, Jorge Orellana, técnico de la Dirección de Sanidad Vegetal del Senasa explicó el uso a campo de la aplicación informática Fixbean que permite conocer la situación del picudo en la red de trampeo en tiempo real y disminuir tiempos de recorrida a campo y la elevación de los datos al sistema. Además se planteó la importancia de considerar a la cosechadora y el grano de algodón como posible dispersor del picudo del algodonero en áreas libre de la plaga.
En el encuentro hubo tres ejes principales; uno sobre temas fitosanitarios y semilla con informes del Senasa y el Instituto Nacional de la Semilla (Inase); un bloque sobre seguros agrícolas en donde se explicó la experiencia piloto en el Chaco con seguros índice de sequía en la campaña 21/22; se abordaron los productos multirriesgo para algodón campaña 22/23 que ofrecen compañías de seguros y se realizó un intercambio de perspectivas y acciones a seguir en seguros climáticos. Mientras que el tercer eje estuvo referido a la temática de la calidad y trazabilidad de la fibra, informándose sobre la red oficial de laboratorios HVI, el Programa de Calidad del Algodón (Procalgodón) y los protocolos 2022 revisados.
Durante la jornada se anunció, además, la realización del Congreso Argentino del Algodón los días 6 y 7 de octubre próximos en la provincia de Santiago del Estero. Participaron del encuentro, el subsecretario de Economías Regionales del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Guillermo Martini; los directores de los Centros Regionales Chaco Formosa del Senasa, Facundo Galvani y del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), Diana Piedra; la directora de Sanidad Vegetal del Senasa, Wilda Ramírez; el subsecretario de Agricultura del Ministerio de Producción, Industria y Empleo de la provincia del Chaco, Jorge García y la coordinadora regional temática del Senasa, Laura Radosavac.
Además, asistieron los equipos técnicos de las provincias algodoneras Santiago del Estero, Formosa, Santa Fe y Corrientes; del INASE, del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), empresas de seguros y asociaciones del sector semillero.