Este comedor que brinda alimentación y otros servicios a más de 60 niños de la zona sur, se encuentra en la intersección de avenida Quijano y calle Juan de Dios Mena y en pocas semanas estará completamente restaurado. Cabe recordar que esta metodología de trabajo consiste en el aporte de los materiales por parte de la institución beneficiaria mientras que el Municipio se encarga de la mano de obra.
Claudio Westtein, secretario de Servicios Públicos comunal, dijo que “continuamos llevando adelante este programa y cada vez recibimos más adhesiones ya que la situación económica obliga a un trabajo conjunto con las instituciones”.
Explicó que “a este merendero lo estamos construyendo totalmente, los niños que asisten diariamente necesitan un edificio nuevo”. En el predio se ejecutan trabajos consistentes en dos sectores para depósito, un salón de usos múltiples y un baño.
“En lo que va de este 2022 llevamos intervenidos con este Programa de Esfuerzo Compartido en 20 entidades de Resistencia, ya sean culturales, deportivas, religiosas y comunitarias”, señaló.
“Buscamos aportar en todo en materia social, con instituciones que a la vez brindan un servicio y a las que de otra manera les sería imposible llevar adelante una obra de construcción”, aseveró.
ASPECTOS DE LA OBRA
Por su parte, el subsecretario de Infraestructura y Equipamiento Urbano, Marcos Pereyra, detalló las obras que se ejecutan en este merendero, indicando que se está construyendo de forma total el inmueble de 45 metros cuadrados. El trabajo ya lleva un 70 por ciento de desarrollo, estimándose que en dos meses estará finalizado.
En tanto, Cristina Casco, propietaria de la vivienda donde funciona el merendero, relató que esta iniciativa solidaria cuenta con la ayuda de María Ferrazano y Natalia Gomila, quienes gestionaron la adquisición de los materiales, para luego acordar con el Municipio la puesta en marcha del Programa de Esfuerzo Compartido.