En el Chaco, 1.200.000 personas quedamos rehenes de las decisiones que toma el Presidente de la Nación Javier Milei, y el ajuste al que somete al pueblo. Pasamos de un Chaco que crecía en empleo, con industria y obras públicas en cada municipio a un Chaco que no tiene rumbo con municipios seriamente afectados en su administración por el atraso en pagos de la coparticipación.
Hasta el 10 de diciembre, el gobierno de Jorge Capitanich dejó ordenada la provincia y muestra de ello es el plan quinquenal 2023-2027 que incluía un conjunto de políticas públicas estratégicamente planificadas con un objetivo claro: consolidar la transformación de la provincia bajo los ejes de producción y empleo, inclusión y equidad social, y gestión pública de calidad.
Este programa planificado fue resultado de los distintos gobiernos del Frente Chaqueño orientados a mayor producción y empleo, inclusión y equidad social, y gestión pública de calidad. Todas ellas políticas de estado hoy diametralmente opuestas las encabeza el gobierno de Juntos por el Cambio en la provincia con Zdero como responsable.
En Chaco la situación sanitaria es gravísima como consecuencia de la pandemia del dengue que este gobierno se niega a reconocer. Ni hablar de la quita de subsidios a los servicios públicos, a lo que se suma la crisis económica que dinamita los salarios de los chaqueños.
Que en este contexto el gobernador del Chaco nos diga que “no tiene horizonte” es confesar que son parte del mismo proyecto político que gobierna el país. Hay un “nosotros” detrás. Fueron todos funcionarios de Macri y hoy son funcionarios de Milei.
Es por ello que le exigimos que muestre la planificación que en campaña decía tener, que convoque a los distintos actores de la sociedad civil, sindicatos, gremios y espacios políticos para trabajar y construir con los chaqueños un Chaco con horizonte de crecimiento, con trabajo y salarios dignos”.
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