Cultura

CHACO: Emprendedoras Chaqueñas Revalorizan Sus Artesanías A Través De Capacitaciones

Desde la ciudad de Formosa Capital, mujeres indígenas, campesinas y emprendedoras están siendo parte de un proyecto que lleva adelante una alianza que reúne a ONU Mujeres, Google y las organizaciones Gran Chaco y Pro Mujer.  Mujeres de Formosa, Salta y Chaco presentaron sus proyectos sociales y comunitarios, que son potenciados con capacitación digital y financiera.

Analía Rodríguez es una emprendedora de Fortín Lavalle que se ve beneficiada por los talleres digitales y financieros. A partir del acompañamiento y las capacitaciones que reciben, pudieron empezar a charlar entre ellas y crear redes, que las ayudaron a cambiar la visión que tenían, por un enfoque distinto y a transformar el valor que le daban a sus artesanías. Antes, cambiaban sus producciones por ropas, que algunas veces eran revendidas por un costo alto; ahora, aprendiendo herramientas financieras, de venta y capacitándose en el uso de las tecnologías para llegar a más personas, lograron añadirle el valor que realmente tienen sus productos hechos a mano.

Consultada acerca de la manera en la que están trabajando con las organizaciones, Analía afirmó: “Con este proyecto que se llama “Womek”, que en la lengua wichí es venta, salimos beneficiados con nuestra asociación gracias a fundación Gran Chaco. Fuimos beneficiarios de este proyecto para trabajar con varias asociaciones dentro de lo que es la Ruta Qom, hablamos de Fortín Lavalle, Miraflores, Espinillo y otras localidades más que están más al norte de la provincia del Chaco”.

Ante la pregunta de a qué se dedican, de qué manera lo hacen y cómo se van a ver beneficiadas con este aporte, la emprendedora sostuvo que “la asociación nuestra y la mayoría de las asociaciones estamos dedicadas a la comercialización de artesanías. Nosotros hacemos esta actividad ya hace ocho años. Estamos trabajando de forma conjunta y este proyecto nos brinda herramientas para seguir trabajando, potenciar más el tema de la comercialización fuera y dentro de la provincia del Chaco y también fuera de la de la Argentina”.

Además, Analía comentó que a través de las capacitaciones pudieron aprender a valorar su trabajo. “Nosotros aprendimos con todas las capacitaciones la importancia de trabajar, pero estas herramientas que nos está dando ahora con varios proyectos, hace que el comprador que está lejos empiece a valorar. Es una herramienta fundamental ahora, más que nada para las jóvenes que están más tiempo con el tema de la tecnología y eso va a ayudar a potenciar desde esa parte”.

“Hay artesanías que llevan 14 o 15 horas de trabajo”

Asimismo, contó que “muchos de los de la gente afuera estaban empezando a desvalorizar el trabajo nuestro. Cuando llega gente a nuestras asociaciones empezamos a explicar que lleva tanto tiempo, tantas horas, y eso también se transmite a través de las redes que hay dentro de las asociaciones. Cada asociación tiene su red, tiene sus encargadas, y ellas son las que se van a seguir capacitando más en este proyecto”.

Consultada por el valor que le ponían antes a las artesanías, que muchas veces eran cambiadas, por ejemplo, por ropas, Analía contó que es una de las transformaciones que se están realizando. “A medida que las mujeres nos fuimos juntando y empezamos a charlar surgieron cambios que para nosotros fueron a pasos agigantados. Hay algunas artesanías que llevan entre 14, 15 horas y que anteriormente nosotros la vendíamos por 250 y que ahora se fueron a 30 mil a 15 mil, depende de todo el diseño que tenga que esa artesanía”.

Además, comentó que antes llegaba gente que compraba sus productos a precios baratos y los vendían por un costo más alto. “Eso hace 8 años atrás que empezamos cambiar. Todo eso por juntarnos, por charlar entre nosotros como mujeres, sobre  lo que a nosotros nos preocupaba. Ahora no solamente con las mujeres de dentro de las asociaciones, sino que también estamos llevando pequeñas capacitaciones y charlas con otras mujeres que no están dentro de la asociación para poder empezar a valorizar sus artesanías, porque es un trabajo, que no se hace en 2 horas, sino que lleva muchísimo tiempo. Eso es muy importante, lo de llevar el conocimiento y transmitir a las mujeres que no están dentro de las asociaciones”, finalizó.

“Estamos muy agradecidas porque nos hacen conocer nuevas herramientas”

Marisa Rojas, artesana de Miraflores, se dedica a trabajar con hojas de palma. A través de la incorporación de nuevos productos con un enfoque fundamental en el cuidado del ambiente, realizan platos de sitios, paneras, bolsos, carteras, entre otras artesanías.  

Consultada por las capacitaciones que recibieron, Marisa pudo recalcar: “Es muy importante el apoyo que estamos recibiendo a través de las instituciones. Estamos muy agradecidas porque nos hacen conocer nuevas herramientas, como por ejemplo la tecnología, que nosotros desconocíamos. De a poquito lo fuimos incorporando y muchas mujeres saben de la importancia de la tecnología porque nos ayuda a promocionar nuestras artesanías y mejora mucho los precios. Llegamos a muchos lugares afuera y conseguimos a muchas personas que nos apoyan comprando nuestros productos y a buen precio. Ahora las que se capacitaron transmiten a las nuevas generaciones”.

Marisa también destacó el trabajo que realizan junto a los y las jóvenes a través de la tecnología e indicó que todo lo que aprenden mediante las capacitaciones también es compartido con otras emprendedoras. “Además, estamos trabajando mucho con las mujeres artesanas para poder llegar a mujeres que no están incluidas en las asociaciones”, enfatizó.