Con el transcurrir del tiempo, hemos aprendido a hacer ese reconocimiento a personas que ocupan el “rol paterno”, abuelos, tíos, hermanos, y tantas otras personas que han paternado con amor y responsabilidad sin tener la obligación sanguínea de hacerlo.
Y es que el rol paterno, la figura de un padre, es notoriamente necesario para el desarrollo de cualquiera de nosotros, en el transcurrir de nuestras vidas.
Papá trabajó desarrollando su oficio de carpintero, inculcando en todos sus hijos e hijas la cultura del trabajo. Junto a mis hermanos, guardamos los mejores recuerdos que sucedieron allí, en esa carpintería, dónde en medio de travesuras y algunas macanas, aprendíamos a cortar y lijar la madera con su ejemplo y ayuda.
Papá es ese hombre de manos trabajadoras pero que saben dar amor y ser incondicional.
Así, hoy, papá sigue siendo el refugio que busco en tiempos de tristeza y angustia, porque sigue siendo mi lugar seguro en el mundo. Y es su risa la que busco para compartir momentos de felicidad.
A pesar de que el calendario marca que hoy es el día del padre, festejemos su vida y su amor cotidianamente, para poder disfrutar de ese cariño inexplicable que nos marca para toda la vida.
Que en cada mesa, se pueda brindar con amor por ellos. Es el deseo de esta intendente, que también es hija y que le pide a Dios lo mismo que todos: que papá sea eterno”.
¡Feliz día del padre!