En su lugar, se propone el uso de ecovasos reutilizables para evitar el desecho y la contaminación generada por los plásticos de un solo uso.
Desde el comité la propuesta fue valorada por su presidente, José Eidman, que además de aceptarla, acentuó el compromiso de la FU con la causa: “Este convenio representa la unión de voluntades para que esta Bienal contribuya a concientizar sobre la necesidad de eliminar el uso de los vasos plásticos de un solo uso”.
Ecoingenio es un emprendimiento de triple impacto, de nuestra región, que busca principalmente reducir el uso de descartables en la provincia, a través de la fabricación de eco-vasos. La propuesta de la empresa consiste en la producción y distribución de dichos vasos para su uso en la totalidad de los puestos que estén dentro del predio La Bienal, la metodología será simple, el usuario deja una seña por el uso del vaso, si desea puede llevarse el vaso como recuerdo o bien se acerca al stand de ecoingenio devuelve el vaso y se le reintegra su dinero.
El representante del emprendimiento ecológico, Diego Ledesma, destacó; “la idea es implementar nuestro sistema de eco vasos reutilizables para que la gente pueda consumir sus bebidas en un vaso reutilizable que luego lo puede devolver y de esta forma evitar que se generen residuos”. Esto sienta un precedente ya que se presenta como una oportunidad única para seguir una narrativa que une al arte (como fuerza orgánica fundante la Bienal) y a la ecología dentro de un arco de coherencia y conciencia social.
Así, y de manera definitiva, para la doceava edición de nuestra Bienal de Escultura, el compromiso medioambiental no escapa de un hilo discursivo: seguir haciendo del arte un bien de todos.