Con el arribo del contingente de la escuela de Villa Chica, los trabajadores del Vivero comenzaron con sus charlas que están destinadas tanto a niños y niñas de escuelas como para integrantes de distintas instituciones que soliciten conocer y recorrer las instalaciones situadas en Bélgica 950 (inmediaciones al barrio Los Troncos). Allí se mostró la producción y el cuidado de las distintas plantas para que los alumnos articulen con las materias que cursan en la escuela. De esa manera, conocieron especies de árboles autóctonos y cómo funciona una huerta, para finalmente volver a sus hogares con un plantín de regalo.
Al respecto de la jornada, el subsecretario de Sistema Lacustre y Pulmones Verdes, Matías Arce, informó que el Municipio agendó al menos 10 visitas más para los próximos días y que esta iniciativa continuará hasta junio y se retomarán desde el mes de septiembre. Detalló que para acceder a la visita guiada, la institución solicitante debe presentar una nota dirigida a la subsecretaría de Sistema Lacustre y Pulmones Verdes ubicada en Av. Rodríguez Peña 415 (Plaza España). De esa manera, podrán visitar el Vivero de manera gratuita con una capacidad máxima de 25 personas por delegación y el medio de transporte corre a cargo de la institución que visita.
La ingeniera agrónoma a cargo de la huerta del Vivero Municipal, Cecilia caballero, señaló a los estudiantes presentes que en el predio trabajan con semillas donadas por el INTA, no se usan agroquímicos y se hace huerta agroecológica con plantas repelentes (menta, burrito) de insectos. También mencionó sobre la confección de macetas con botellas PET para contribuir con el reciclado y expresó que muchos de los niños presentes observaron por primera vez el origen de distintas verduras.
Durante la recorrida, Ariana Ramírez, docente de la EEP N° 700, destacó el “muy buen recibimiento, organización y predisposición de los chicos del Vivero. Fue una muy linda experiencia”. Además, acotó el entusiasmo de los niños y afirmó que este tipo de visitas son “significativas y es mucho más enriquecedor venir a estos lugares que enseñar desde el aula, por lo que no es un día perdido. Les queda la enseñanza”.