Corrientes

CORRIENTES: Presunto Ladrón Murió Al Caer Del Muro De Un Templo Evangélico

Un joven que ingresó a un templo evangélico con presuntas intenciones de robo murió al caer desde un muro de tres metros de altura, en el momento que salía presuroso al notar la presencia de un sereno.

La fatalidad se produjo el viernes a la mañana en la ciudad de Gobernador Virasoro; la Policía logró identificar al presunto ladrón después de varias horas.

Se trata de Walter Nicolás U., de 27 años, quien presentaba una seria lesión en la cabeza. Según la autopsia médico legal, su deceso fue debido a un “traumatismo craneoencefálico” sufrido “en forma accidental”.

El cuidador del predio dijo a las autoridades que el incidente trágico ocurrió al amanecer en el establecimiento denominado como “Asamblea de Dios”, ubicado en la esquina de calles 23 de Septiembre y Félix de Azara.

Junto al cuerpo de Walter, los efectivos de la comisaría seccional Primera encontraron la parte de un “torpedo de automóvil” y un estéreo.

Esos accesorios serían sustraídos pero no de la iglesia evangélica, precisaron a época fuentes policiales.

EN LA COMISARÍA INVESTIGAN EL HECHO COMO UNA TRÁGICA TENTATIVA DE ROBO.

La principal teoría de los detectives apunta a una tentativa de robo por parte del joven en el interior del predio religioso.

Pasadas las 6 de anteayer el sereno escuchó ruidos extraños en la parte de adentro. Entonces comenzó a recorrer las instalaciones hasta advertir que alguien escapaba sobre una pared que comunica a un sector en plena etapa de construcción, según precisó Diario Época.

La mala fortuna del presunto delincuente en su afán de salir apresurado provocó que cayera de mala manera, golpeándose la cabeza contra el suelo. Como consecuencia del impacto el muchacho perdió la vida en el acto.

El testigo concurrió hasta la dependencia policial adonde ingresó alrededor de las 7 para informar de lo sucedido.

Los efectivos fueron al templo en el que observaron a Walter en posición de cúbito ventral, vestido con un saco de lana y un pantalón largo de color mostaza.

A simple vista notaron que el joven presentaba una lesión sangrante en la cabeza y junto a él estaban las partes de un vehículo automotor.

La investigación policial permitió saber horas más tarde que el supuesto maleante era conocido con el apodo de “Waly” y vivía en calle Manuel Ocampo. En ese domicilio ubicaron a un hombre de 72 años, padre del joven fallecido, quien lo reconoció en la morgue local.

Luego de los pasos legales pertinentes, el cuerpo fue entregado a familiares para el velatorio y posterior inhumación.