Se tratará de un conjunto de actividades pedagógicas y procesos mediante por el cual los y las estudiantes adquieren conocimientos necesarios para la compresión del funcionamiento y significado del dinero, del gasto, del ahorro y los diferentes productos financieros, que permitan desarrollar habilidades necesarias para llevar una adecuada gestión de nuestras finanzas personales y garantizarnos una buena calidad de vida presente y futura.
En la elaboración de los contenidos curriculares, se deberán promover una inclusión financiera responsable. Para ello deberá contribuir a fomentar la confianza en el sistema financiero formal a través de las mejoras de las capacidades y conocimientos de los individuos y la creación de buenos hábitos y comportamientos para la administración y planificación financiera.
Esta propuesta busca inculcar a las y los estudiantes buenas prácticas y hábitos saludables en relación a cuestiones financieras, generar habilidades para entender productos de crédito, ahorro, pagos y seguros, promover actitudes responsables en relación a la toma de decisiones que involucren recursos financieros.
Son también sus objetivos, brindar información científica, precisa, y adecuada para cada etapa del ciclo de vida del estudiante, contribuir a la inclusión social sin distinción de género.
Promover una concepción positiva de los aspectos financieros, que favorezcan al desarrollo integral, pleno y armónico de las personas, incentivar la planificación financiera y el ahorro, impulsar la transición en el uso de pagos digitales en reemplazo del efectivo y minimizar prácticas abusivas y fraudulentas.
“Los conocimientos básicos sobre las finanzas personales y el mundo económico son fundamentales para poder, en primer lugar tener acceso al sistema financiero y en segundo para tomar decisiones adecuadas en la vida adulta, en relación al ahorro y a la inversión. Por eso es recomendable que se enseñe desde edades tempranas” argumentó el autor.
En tanto que describiendo datos estadísticos informó “Argentina sigue siendo uno de los países con menos conocimientos financieros a nivel regional. En una encuesta de medición de capacidades financieras en la Argentina, realizada por el Banco de Desarrollo de América Latina y el Banco Central de la República Argentina, el país se sitúa en el puesto 37 de 39 países, después de Chile, Bolivia, Ecuador, Colombia y Perú, y con Francia, Canadá y Finlandia ocupando los 3 primeros lugares” detalló Bergia.
“Desde nuestro espacio consideramos necesaria la incorporación de la educación financiera en la currícula educativa de la provincia, con el objeto de brindarles a nuestros jóvenes las herramientas necesarias para que puedan insertarse y desenvolverse con facilidad en la sociedad, disminuyendo los niveles de desigualdad y fomentando la equidad. Estaríamos formando generaciones de jóvenes que contribuirán al desarrollo sostenible no solo de la Provincia, sino también de la Nación” manifestó el legislador.
Finalmente remarcó que con este proyecto de ley “se busca generar en los estudiantes buenos hábitos y comportamientos para la planificación financiera, incentivar la implementación de una administración responsable de los recursos y favorecer la igualdad de oportunidades”.