Los efectivos realizaban tareas investigativas en relación a los presuntos puntos de venta y consumo de estupefacientes. Luego de distintas prácticas investigativas pudieron conocer que, en una de las viviendas del barrio Funebrero funcionaria un kiosco de drogas. Solicitaron allanamiento al magistrado en turno.
Allí realizaron una diligencia judicial donde fueron atendidos por el propietario de 44 años y tras la inspección del inmueble hallaron dos celulares y 20 envoltorios de cocaína lista para la comercialización. Asimismo, la suma de 86.570 pesos en efectivo y varios elementos con los cuales cortan las sustancias y una motocicleta.
El ciudadano fue notificado de la Infracción a la Ley N° 23.737 quedando aprehendido a cargo de la fiscalía Antidrogas N° 1. Esta dispuso el secuestro de todos los elementos y el traslado junto al aprehendido a la unidad actuante.