“Bienvenida sea esta ley y su incorporación a nuestra agenda ambiental, junto a la Ley 27.621 de Educación Ambiental, también muy importante su aplicación, la Ley 27.566, la Ley de Humedales que apoyamos su sanción en el Congreso Nacional y aquí en la Legislatura Provincial”, dijo el mandatario chaqueño.
Capitanich, quien estuvo acompañado por la vicegobernadora, Analia Rach Quiroga; la secretaria de Desarrollo Territorial y Ambiente, Marta Soneira y el secretario de Medio Ambiente de Nación, Homero Bibiloni, entre otros, aseveró que la agenda ambiental del Gobierno “es integral, es realista y ambiciosa, y es una apuesta decidida por el desarrollo sostenible de nuestro país y nuestra provincia”.
El gobernador detalló que este tipo de capacitaciones ya comenzaron a realizarse en el ámbito de los tres poderes del Estado y que de las mismas participaron 96 trabajadores del Poder Legislativo y 427 miembros del Poder Judicial.
El gobernador recordó el mensaje del año 1972 de Juan Domingo Perón y el más actual del Papa Francisco sobre el deseo y la necesidad imperiosa de cuidar la protección del planeta.
Ante esto Capitanich aseguró que existen “asimetrías severas” en materia de residuos sólidos urbanos. Más allá de esto destacó que en la provincia 29, muchos de ellos nucleados, de los 69 municipios cuentan con equipamiento para el tratamiento de residuos para su ulterior reciclado. Sin embargo dijo que esto es una “gran asignatura pendiente para la Argentina”.
Ante esta situación dijo que es necesario “lograr un apoyo explícito desde el punto vista de la asignación presupuestaria para el fortalecimiento una red de organizaciones sociales que permita el proceso de clasificación y tratamiento de residuos sólidos urbanos para el ulterior mecanismo de comercialización”.
Bono ambiental
Por otra parte dijo que “es absolutamente imprescindible establecer disponibilidad de recursos para la protección de los bosques nativos porque eso también significa una reparación histórica de las personas que allí viven”.
Detalló que el Chaco tiene el equivalente al 50% de su superficie boscosa y que El Impenetrable, junto a la Amazonía brasilera es uno de los grande generadores de oxígeno “y no tenemos ninguna compensación”.
“Los platos rotos de los países industrializados que destruyen el planeta los pagan los pobres de la periferia del mundo y eso es absolutamente injusto y por eso impulsamos una compensación ambiental, ya que somos acreedores ambientales, la emisión de un instrumento por parte de los países más desarrollados”, explicó.
Mencionó que esto se destinaría a un programa que permita, en El Impenetrable, que sus pobladores cuenten con vivienda digna, agua potable, rutas y mejores condiciones de vida, educación, salud y seguridad, además de un ingreso mínimo social garantizado. Además, el desarrollo de cadenas ambientales de plantas solares para la producción energía, cultivos que sean sustentables y el fomento del turismo rural, entre otras cosas.