Por otra parte, la reapertura del Guido —que será virtual o ajustándose a los protocolos que demande la situación sanitaria del momento— oficiará también como presentación oficial de su nueva directora, la artista y gestora Gabriela Ávalos, quien viene desarrollando desde hace años un intenso trabajo de puesta en valor del patrimonio y las artes chaqueñas.
Los anuncios integran el programa Patrimonio Activo del organismo que pone en valor sus Centros Culturales y el patrimonio cultural de la provincia.
“El Guido ha sido la puerta de entrada a la vida cultural y artística de muchas chaqueñas y chaqueños, un espacio de gran valor simbólico y social por el que han pasado artistas locales, nacionales e internacionales que enriquecieron nuestro afán de diversidad”, señaló Mariela Quirós, quien valoró, sobre todo, el hecho de que la nueva directora del espacio sea una mujer. “No es un detalle menor, forma parte de una decisión política, de la necesidad de que nuestras políticas culturales planteen una perspectiva de género, en sintonía con las demandas y vivencias sociales de nuestra comunidad”, aseguró Quirós.
En ese sentido, hay que destacar la trayectoria de Gabriela Ávalos, quien como directora escénica, coreógrafa y productora de danza independiente ha formado parte del Departamento de Danza, del Proyecto de Patrimonio Musical del Chacú “Enlazos”, y en la Producción y Programación de la Casa de las Culturas.
El plan de trabajo propuesto por la nueva directora del Guido, contempla, principalmente, la necesidad de una vinculación constante con gestores culturales, artistas y productores locales que fortalezca el espacio con propuestas artísticas “que incidan en la conformación de públicos diversos dentro del entramado cultural de la provincia”.
“La diversidad y la pluralidad cultural nos definen como sociedad, y esa condición nos posiciona en la esfera nacional de una manera original, como polo cultural regional en constante innovación”, afirma Gabriela Ávalos, a partir de lo cual propone “un accionar conjunto para continuarnos en el desarrollo de un pensamiento identitario en la escena local, ampliando la noción en torno a la conformación de identidades y a los nuevos derechos en la autodeterminación, en la igualdad, equidad y en la actitud de apertura hacia las variadas corrientes estéticas emergentes”.
Refacciones y puesta a punto
La realidad edilicia del Complejo Cultural distaba de ser la ideal, tanto en términos escénicos como en los más elementales de seguridad. Las últimas obras de refacción y mantenimiento se realizaron entre los años 2009 y 2012, hace casi una década. El tiempo transcurrido se hizo sentir sobre un edificio que, por su antigüedad y sus características demanda de una revisión y un cuidado permanentes.
A través de la actual gestión del Instituto de Cultura, y en el marco de las obras que viene llevando adelante el Ministerio de Infraestructura de la Provincia, se pudo avanzar con las tareas de refacción que el complejo cultural tanto necesitaba. Se trata de trabajos programados en tres etapas, dos de las cuales han culminado, más una tercera —que incluye refacciones en sanitarios y camarines— que finalizará en el transcurso del año.
“El Guido es un emblema de la provincia, cobija y contempla todas nuestras expresiones artísticas, incluso aquellas que están en surgimiento, con lo cual es imprescindible para el desarrollo cultural que sus instalaciones funcionen a pleno”, aseguró Mariela Quirós. La presidenta del Instituto de Cultura destacó la voluntad política del gobierno provincial “por avanzar en la puesta a punto de un espacio trascendental para garantizar el acceso y el derecho a la cultura”.
Entre las obras de refacción y mantenimiento más significativas que se realizaron en el Guido, se cuentan la reparación del puente hidráulico —rampa de acceso al escenario—, trabajos estructurales de seguridad, electricidad y plomería. Asimismo, se pintaron todos los espacios necesarios para una mejor estética y funcionalidad, desde el llamado patio de artistas, hasta las fachadas, oficinas y hall de accesos. Se repararon todos los sistemas de iluminación de salas, tanto la del teatro como la del microcine, además de la iluminación en marquesina y se reparó la cartelería. También fueron reparados los equipos de aire y se cambiaron los tanques de agua, que presentaban un alto grado de deterioro, revisándose todas las instalaciones sanitarias. Se repararon, además, el ascensor hacia el microcine y el sistema estructural del edificio, que presentaba grandes grietas en las bovedillas de base en subsuelo.
Sigue en desarrollo la colocación de nuevos equipos de acondicionamiento de aire tipo roof top, para mejorar la ventilación como demanda el protocolo, y para recuperar la acústica de la sala.
Por otra parte, serán restaurados todos los sectores de sanitarios, que serán convertidos en camarines anulando los actuales por seguridad extrema actualmente ubicados en el subsuelo, y revitalizando el sector del patio de artistas, se seguirá con el mejoramiento de las instalaciones de incendio, darán mayor caudal para la seguridad del edificio.
“Nos enorgullece especialmente el trabajo realizado en el Guido Miranda por la relevancia que el espacio tiene en la generación y en el fortalecimiento del vínculo comunitario”, enfatizó Mariela Quirós y agregó que “nuestros centros culturales son espacios donde las políticas públicas expresan su mejor perfil, son nuestros puntos de encuentro, de debate y donde más se siente la diversidad que tanto reivindicamos”.