Y la mujer siempre tuvo y tiene un rol fundamental en esas lides: desde Carmen de Ross, fundadora de la primera biblioteca chaqueña (la centenaria y aún vigente Biblioteca Rivadavia de calle Pellegrini), la labor de Hilda Torres Varela, esposa y compañera de sueños de Aldo Boglietti en el Fogón de los Arrieros; Yolanda Pereno de Elizondo, que hizo conocer al Chaco en el mundo mediante el Coro Polifónico, la inolvidable Chichín Obal en teatro, María Emilia Barba y Paquita Gómez en la danza, Nadecha Brizuela maestra de voces, algunas como tantas otras, incluídas las mujeres de los pueblos originarios que dejaron su impronta en nuestra cultura que Hoy, en esta fecha tan especial en que se reconoce a la mujer, ya no como “el sexo débil”, sino como protagonista indiscutida de la movida local, con estilos, conceptos y pensamientos propios; al frente academias, institutos, museos, en constante creación, queremos compartir la voz y la opinión de cuatro mujeres del arte de distintas generaciones y expresiones artísticas de nuestro medio.
Silvia Kum, reconocida pintora de larga trayectoria tanto local como nacional expresó que “estoy trabajando en una serie que se llama “MUJERES al borde”. Busca resaltar el lenguaje de la mujer muchas veces marginal reivindicando la belleza más allá de las formas y colores esperados; cada una tiene algo diferente para dar y decir a través del lenguaje y colores entrelazado azules. Retratan lazos entres mujeres como forma de respetar y superar disfrutando el borde y vivir plenamente la conjunción de colores y belleza que cada mujer guarda como un secreto en su corazón.
Como mujer artista en el mundo del arte me sentí siempre respetada por mí trabajo; tuve profesoras en la escuela de Bellas Artes que allanaron mí camino enseñándome que la obra debe ser buena independientemente de ser hombre o mujer; manejando la libertad creadora; las técnicas y colores dejando siempre mí impronta y sello personal en todas mis obras.
En mi rol de mujer artista en nuestro medio me sentí respetada y valorada desde el inicio de mí carrera. Siempre entendí que la obra debe hablar y dejar un mensaje como decía mí maestro Oscar Sanchez Kelly se puede ver en sus pinturas sus experiencias; sentimientos y emociones bien definidas en los temas que trata a través de los cuadros. Existe una experiencia de cantidad en el estudio de composición y color que surgen de su sensibilidad y que termina con la racionalidad del orden en la distribución de sus planos; líneas y geometría sensible. Experiencia; trabajo incansable dan un resultado grandilocuente de una artista joven. No encuentro diferencias entre la mujer y el hombre artista. Estoy convencida que el arte trasciende a toda diferencia y es sanador. En el día de la mujer debo agradecer a todos mis maestros hombres que me han convertido en el ser sensible y artista en el que hoy me he convertido. Entre ellos Julio Zalazar; Rodolfo Schenone; Fabriciano Gómez; y muchos más. En todos estos años he transitado el camino del arte con libertad y respeto; en la docencia dónde enseñe con el corazón y en cada una de mis exposiciones donde saque del baúl de los recuerdos los secretos más intimos de mí vida pintándolos de azul; mí color preferido”.
Graciela Bepre, docente y ex directora del Museo de Bellas Artes de la provincia indicó “en otras épocas tal vez la mujer no era considerada y le costaba encontrar su lugar dentro del arte. Hoy día creo no existen diferencias. Porque no se trata de genero, sino de que su obra pueda insertarse en el cambiante circuito del arte y desde la 2da parte del siglo XX a la actualidad se encuentran excelentes referentes mujeres que marcan el camino”, manifestó Bepre, quien se considera “una teórica del arte, por y para eso estudié crítica en la UNA”.
Sandra Rodriguez, destacada muralista, titular del Taller Tesela Pink dice lo suyo. “Ser mujer de una generación marcada en estructuras predeterminadas y con roles marcados y designados , fue un desafio para mi. Aunque desde chica fui muy activa y participativa , estudiando arte y danzas en mi Quitilipi natal…considero que cuando desempeñamos roles tan importantes como ser madre , ser mujer y ser artista es cuando la verdadera organizacion ES nuestra vida. Me maneje como mama canguro durante varios años….llevando a mis hijos a mis clases de danza o pintura, aprovechando esta situacion para hacer docencia tambien con ellos; creo, al mirar atras , que lo hice bien, que supe aprender, transmitir y sembrar la semilla del arte.
Respetada por mis pares casi en general, y tratando de avanzar aun cuando notaba ( y noto) que algo no está bien…COMO LA CIGARRA de Maria Elena Walsh.
Y el bendito siglo XVII que marcó un antes y un despues en la integracion y superacion de la mujer en el arte.
Vivimos una epoca historica, porque que en la actualidad existe un Arte femenino representativo de una femeneidad universal o de una escencia de lo femenino que ilustra el universo de valores y sentidos (sensibilidad, corporalidad, afectividad, etc.) y que no está opuesto al masculino sino que ha llegado para complementarlo y mejorarlo…ya que de distintas ideas y conceptos se obtienen maravillosas ideas nuevas.
Este es el gran desafio de la mujer artista actual. Hacer de las diferencias y de tanto desencuentro y odio. Una ventana, una luz, para acordarnos que somos, sobretodo, humanos”
Ruth Centurión, joven mujer, muralista y pintora; titular del Taller Imagina también tiene algo para aportar. “En el ámbito del arte encuentro respeto, elegí rodearme de personas amables, generosas de las cuales aprendo muchísimo. En mi rol como mujer me siento constantemente desafiada a romper estereotipos de pensamientos impuestos o propios, que hacen creer que las mujeres no pueden hacer ciertas cosas o le es más difícil. Yo creo que pese a la situación económica y social las mujeres somos capaces de todo, muchas veces el límite o prejuicio está en nuestro pensamiento, no en nuestra capacidad. Soy artista, soy docente en el arte, soy alumna, (iniciando mi carrera como modelo), soy esposa, y encuentro el apoyo y esfuerzo doble de mi compañero para que yo pudiera llegar a tiempo a una muestra, comprar materiales, armar bastidores, para mí es muy valioso y es totalmente diferente a lo que me decían estando soltera. Sé que el camino del arte es difícil, pero con el apoyo correcto se puede mucho más. Por eso como mujer constantemente estoy hablando de mis experiencias, que hay pensamientos y dichos negativos hacia las mujeres que hacen que no se animen a hacer lo que realmente les apasiona”.