“Nuestra política salarial va a ser compatible con una política tarifaria y un acuerdo de precios. Por eso estamos trabajando desde el desarrollo del diseño de la política salarial conjuntamente a un acuerdo por canasta escolar, canasta de productos básicos y estrategias desde el punto de vista del precio de los servicios”, explicó el gobernador en comunicación con La Radio, y agregó que “estoy absolutamente convencido de que, en el 2021, después de los efectos de la pandemia, necesitamos tener un horizonte de recuperación de poder adquisitivo de salarios, por lo tanto, el máximo esfuerzo que vamos a hacer es trabajar en los mecanismos de recuperación del poder adquisitivo”.
Al respecto, precisó que este plan se traza, “primero, con el incremento del salario nominal. Segundo, con la reducción del costo de los bienes y servicios que se acceden, y cuando se accede se tiene que hacer de una manera compatible con el ingreso disponible de la familia”. “Vamos a hacer el máximo esfuerzo para eso, que el precio de los bienes tienda no a incrementarse, sino a tener una estabilidad, de lo contrario obviamente que a un trabajador no le alcanza la plata, un cuentapropista no le alcanza la plata, alguien que percibe un ingreso disponible por el sistema de seguridad social también ve licuado sus ingresos. O sea que vamos a hacer el máximo esfuerzo para ordenar las variables que nos permitan recuperar el poder adquisitivo”, aseguró el gobernador.
En cuanto a la negociación con los trabajadores públicos, Capitanich anticipó que “queremos hacer el máximo esfuerzo para que en las próximas semanas esta política salarial esté perfectamente definida”, y remarcó que el encargado de llevar adelante esta negociación es el ministro Santiago Pérez Pons, quien según indicó el gobernador “está trabajando en la convocatoria y estableciendo un mecanismo de paritaria con todos los actores y sectores”.
Al ser consultado por las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) el gobernador ratificó su postura conocida en los últimos días respecto a un diferimiento en las fechas y sostuvo que es un tema que se está hablando. “La idea era suspender, pero si no hay consenso, ahora si se está trabajando que en vez del 8 de agosto, se corra para septiembre, y ahí se plantea, primero, en la segunda quincena de septiembre, y segundo que el plazo entre las PASO y las generales sea de, por ejemplo, 30 días”, manifestó.
En ese camino, aseguró que la provincia del Chaco reduciría a la mitad la cantidad de elecciones en su agenda para unificar con las nacionales. “No vamos a desdoblar porque queremos unificar las nacionales y provinciales porque nos ahorramos recursos y no sometemos a la ciudadanía a 4 elecciones”, indicó.
“La hipótesis que se está debatiendo de manera razonable es que las primarias tengan un diferimiento en el tiempo y segundo que el plazo se reduzca”, insistió, y remarcó que “esto se va a debatir, durante febrero o marzo se resuelva con consenso, y en virtud de eso tengamos la señal para trabajar con la oposición acá”.