El ciclo tiene por objetivo conmemorar fechas significativas de la historia generando espacios de reflexión y puesta en valor de la identidad intercultural. La iniciativa forma parte del programa de Diversidad Colectiva, que tiene por objetivo celebrar nuestra identidad fortaleciendo los lazos comunitarios y la construcción colectiva, promoviendo espacios de reflexión, expresión y producción cultural desde una mirada intercultural y diversa.
Todas las banderas es resultado de un trabajo conjunto entre el Instituto de Cultura y Chaco TV, quienes brindan el soporte tecnológico, la experiencia en la realización audiovisual y los recursos humanos para realizar este ciclo. Mientras que los contenidos históricos son formulados en conjunto entre la Dirección de Patrimonio Cultural del organismo cultural provincial y la Junta de Estudios Históricos del Chaco.
“A través de un análisis profundo sobre las conquistas del pasado, y las luchas que aún siguen vigentes en nuestra actualidad, este ciclo propone generar espacios de reflexión colectiva junto a historiadoras de nuestra provincia, y cuenta con la conducción del periodista Marcelo Nieto”, describieron desde la producción.
Día de la Soberanía Nacional
La Batalla de la Vuelta de Obligado, en 1845, marcó un hito por el cual, cada 20 de noviembre, se conmemora y celebra el Día de la Soberanía Nacional. Ese día, soldados argentinos repelieron la invasión del ejército anglo-francés, que pretendía colonizar los territorios de nuestro país. Pero el Gobierno de Juan Manuel de Rosas, respaldado desde el exilio por el general José de San Martín, preparó una resistencia y lo impidió.
Las fuerzas invasoras buscaban ingresar por el Paraná. Sin embargo, las tropas nacionales, al mando de Lucio Mansilla, se anticiparon en un estrecho recodo de ese río: la Vuelta de Obligado, en el distrito bonaerense de San Pedro.
El número de fuerzas enemigas superaba ampliamente en cantidad y modernidad de su armamento a las argentinas, que sin embargo no se amedrentaron y pelearon durante siete horas. De este modo, lograron que las tropas adversarias no pudieran ocupar las costas, objetivo necesario para poder adentrarse en el territorio argentino.
La resistencia a la invasión extranjera logró la defensa del país en términos de fronteras y comerciales, ya que se evitó que colocaran en el mercado los productos extranjeros desplazando a los artículos locales.
El acontecimiento sirvió para ratificar y garantizar la soberanía nacional, implicó la firma de un tratado de paz entre Argentina, Francia y Gran Bretaña, y quedó grabado en la historia como un símbolo de independencia, libertad y unidad nacional.