Algunas de las herramientas entregadas fueron: carretillas, palas, hachas, azadas, machetes, y mangueras, entre otras, además de semillas, insecticidas y herbicidas, que se sumaron a la instalación de una bomba para el riego de los cultivos realizados en los lotes Wet Elh.
La Secretaría también ofreció desde un principio el asesoramiento técnico a los productores, que fueron responsables de la instalación de la bomba de riego, reparación de los caños del acueducto, e instalación de mangueras de riego y aspersores.
El proyecto tiene como fin el autoabastecimiento y la venta al mercado interno. La huerta realizada abarca 60 metros cuadrados, con 35 almácigos de 11 metros cada uno aproximadamente.
En este sentido, Ismael Coria, miembro del equipo técnico responsable del proyecto comentó que la iniciativa causó gran interés en la comunidad, lo que a su vez llevó a que muchas familias empezaran a trabajar en sus propios cultivos. Actualmente existen 10 huertas en producción en la zona oeste y otras 26 que se encuentran en distintas etapas de limpieza y cercado, listas para comenzar a producir a la brevedad.
En este último tiempo la manera de trabajar en el lugar fue modificada, en relación a los protocolos COVID-19, aunque ya se cosecharon los primeros cultivos que fueron vendidos a revendedores y a las familias de la zona, que sobre todo valoran que los vegetales ofrecidos sean orgánicos.