En ese sector volvieron las tareas relacionadas a la recuperación general de pavimento, cuyo hundimiento que data de hace más de un año generó perjuicios a los resistencianos que habitan en esas inmediaciones y también a los conductores de distintos vehículos que diariamente circulaban por allí.
La gestión del intendente Gustavo Martínez elaboró un proyecto con las áreas municipales competentes y se están llevando a cabo los trabajos con operarios de direcciones comunales, coordinados por la Secretaría de Planificación, Infraestructura y Ambiente, y la Secretaría de Servicios Públicos.
Luego de realizarse el estudio de campo y el diagnóstico del problema, el Municipio derivó en ese sitio una máquina excavadora y otras unidades móviles especiales para esta tarea, que consistirá en la reparación de la pérdida que presenta el conducto subterráneo de desagües existente hace varios años, lo que provocó el hundimiento del pavimento.
Un Trabajo Complejo Con Recursos Municipales
En esa esquina de Wilde y La Rioja estuvo presente el secretario de Planificación, Infraestructura y Ambiente, Guillermo Monzón, para detallar que esta obra tan necesaria anunciada a principios de 2020 “tenía una demanda de más de un año por parte de los vecinos y cumple una función hidráulica muy importante para esta zona de la ciudad de Resistencia, en el norte del casco céntrico”.
“Empezamos a trabajar en el mes de febrero, pero justo después nos tocó la pandemia. En ese período se armó el proyecto para la intervención y lo más importante es que podemos realizar esta obra por administración. Lo que quiero decir es que estamos haciendo una planificación inteligente, que es lo que quiere el Intendente y que es utilizar todos los recursos que tenemos en el ámbito municipal. Acá contamos con recursos de equipos técnicos, de profesionales de experiencia y con mano de obra que es exclusivamente municipal, lo que es muy importante”, enfatizó.
En ese marco, consideró que hay “ser inteligente e ir resolviendo los problemas de manera planificada. Tenemos que buscar la solución de esa manera y hoy estamos haciendo una obra muy importante porque los vecinos estaban reclamando por el tiempo transcurrido y la función que cumple en la cuestión hidráulica.
A su vez, Monzón expresó que el mencionado bache “significaba un peligro vial porque tenía un hundimiento que provocaba dificultad para todos los vehículos que transitaban por esta zona y esa situación hacía que el Municipio tenga que actuar rápidamente. Por eso, ni bien asumimos con esta gestión, el intendente Gustavo Martínez nos encargó esta tarea de empezar a trabajar sobre este bacheo como en varios otros que en había problemas. Este plan va a contemplar más adelante otras obras relacionadas con todo este relevamiento que hemos hecho en estos meses de gestión sobre otros desagües, como el que está en avenida Los Inmigrantes y que repararemos en los próximos días”.
“Lo importante es que tenemos un plan de trabajo y estamos haciendo todo con recursos propios, con mucho esfuerzo, pero lo vamos a realizar al igual que a otras obras”, destacó el funcionario de gabinete al tiempo que resaltó la intervención activa de la Dirección General de Pavimento y Conservación, junto a la Dirección General de Ingeniería.
El secretario de Servicios Públicos, Claudio Westtein, supervisó de cerca la obra y adelantó que “el objetivo es llegar a otros lugares y trabajar en todas las demandas existentes”, mencionando la importancia del trabajo conjunto para beneficiar a los vecinos de Resistencia.
Detalles De Una Obra Esperada Por Los Vecinos
Fabián Bravo, titular de la Dirección General de Pavimento y Conservación, detalló la complejidad de la obra de bacheo en Wilde y La Rioja, dado que presenta también una dificultad hidráulica. Así, en compañía del subsecretario de Infraestructura y Equipamiento Urbano, Marcos Pereyra, explicó que en marzo “hicimos un destape y verificamos que el conducto tiene tres fisuras muy grandes y tiene una contrapendiente de aproximadamente 20 centímetros. Lo que vamos a hacer, antes de reparar el bache, es reparar la parte de obra hidráulica”.
En ese sentido, destacó que la Dirección General de Ingeniería realizó un proyecto acorde a estas condiciones, ya que el conducto dañado tiene más de 50 años y “la mejor opción que se encontró es colocar dentro de ese conducto un caño PEAD (constituido básicamente de policarbonato para mayor duración), que son cuatro caños unidos de 6 metros cada uno, para cubrir 24 metros en total entre una cámara que está en el extremo de una bocacalle y entre otra cámara que está en el extremo de la otra bocacalle”, expresó en relación al espacio constituido entre los dos parterres que delimitan la calle La Rioja.
En cuanto al proceso de reparación, Bravo dijo que se coloca el nuevo caño, se tapa eso con RDC (relleno de densidad controlada), se va compactando la tierra, se llega a un nivel de RDC y ya queda como un bache común donde se tira el RDC y el hormigón para posibilitar la circulación de vehículos y peatones”.
Intervenciones Que Se Extienden A Otros Puntos
Respecto a plazos tentativos, el titular de Pavimento sostuvo que la obra tiene una duración proyectada de 60 días, siempre sujeta a factores climáticos.
Por otra parte, afirmó que “lo que nos ha pedido el intendente Gustavo Martínez es que luego de esto sigamos por la misma avenida, en la continuidad de Los Inmigrantes, en la zona del puente homónimo frente al Domo del Centenario, donde se llevará a cabo una obra de similares características sobre un conducto de bastante antigüedad. Se trata de un caño de cerca de 50 metros”.
Luego de concluir con esas reparaciones, se hará lo propio en calle La Cangayé, entre el 400 y el 500, donde hay un hundimiento considerable “y después seguir con trabajos similares en otros puntos”, finalizó.