A partir de la semana que viene el predio Ñu Porá Don Bosco abrirá sus puertas para brindar atención sanitaria en Resistencia ante posibles casos positivos de COVID-19. Esto se logró a partir de un convenio entre la casa de la institución salesiana y el Instituto Provincial Urbano y de Vivienda (IPDUV) de manera conjunta con el Ministerio de Salud.
Así lo aseguró el titular del (IPDUV), Diego Arévalo, quien tomó esta determinación ante cualquier eventualidad que pudiera surgir colaborando en la readecuación necesaria del lugar para la atención de los pacientes. El predio se está preparando según los protocolos establecidos por los Ministerios de Salud de Nación y Provincia.
El IPDUV decidió adherirse a estas medidas preventivas con la provisión de 75 camas teniendo en cuenta un sector destinado no solo a los ciudadanos sino también a médicos y enfermeros que lo requieran hasta superar la fase crítica de la cuarentena. Este espacio contará con profesionales de la salud y estará destinado para contener a las personas que no tengan un lugar donde recibir tratamiento pero cuyos casos no sean de extrema gravedad.
Además, quienes sean ubicados en el lugar tendrán a su disposición baños donde asearse y se les brindará alimentación diaria. Por ello, el funcionario hizo extensivo su agradecimiento a todas las personas que están trabajando para que esto sea posible y al establecimiento Ñu Porá Don Bosco en especial, por poner a disposición el lugar físico para la atención sanitaria de las personas.