En un esfuerzo mancomunado de las familias rurales, el cooperativismo y la militancia de la CANPO, la agricultura familiar está aportando en medio de la crisis por la pandemia, alimentos para la mesa de las familias.
Como ya se ha reconocido en todos los foros internacionales, la agricultura familiar, con sus producciones es la única que puede garantizar abastecimiento local, con cadenas cortas de valor, por lo cual ayuda a “enfriar” el Planeta frente al cambio climático global; además abarata el costo de los alimentos a los cuales los argentinos estamos culturalmente acostumbrados.
Sus procesos productivos con uso de bajos insumos químicos contaminantes, hacen de sus productos un alimento saludable, inocuo y fresco, con precios accesibles.
La agricultura familiar garantiza la construcción social en los territorios, genera empleabilidad rural, aporta a la diversidad natural y cultural.
Un desarrollo provincial equilibrado debe incluir necesariamente la consideración del sector que provee más del 60 por ciento de los alimentos a las mesas del pueblo, en este equilibrio territorial el Estado,a traves de sus organismo competentes tiene un rol importante como asimismo ampliar estas experiencias para el universo del sector de la AF,haciendo énfasis en lo que es la planificación y asistencia técnica, la logística (transporte), las cadenas de frío y el financiamiento para que se incremente la producción con base agroecológica, que es lo que la comunidad demanda.