Dicho beneficio será de aplicación a todos aquellos usuarios que habiten en zonas rurales, sean clientes de cooperativas de electrificación rural y/o de la Empresa SECHEEP, y que al momento de la promulgación de la presente ley adeuden una o más boletas.
“Prorrogar los vencimientos de las facturas de luz de usuarios que sean pobladores rurales, sector el cual, y dado el marco de emergencia sanitaria que nos toca afrontar, se ven seriamente afectados tanto por la imposibilidad de trabajar, dado que en su mayoría son cuentapropistas y/o autónomos que se mueven dentro del esquema de la denominada economía informal o popular, como también de circular libremente para así acercarse a los centros de pago a abonar las respectivas facturas” analizó el autor para la elaboración de la propuesta legislativa.
En este sentido, continuó explicando que “dado el difícil momento que se vive en el mundo, los pobladores rurales no son la excepción, se encuentran en una situación de particular vulnerabilidad por la cuarentena decretada y el consiguiente impedimento de trabajar libremente y obtener ganancias de la venta de su producción, en gran parte fruto del producido de la agricultura familiar, la sementera baja y la cría de ganado menor” reflexionó Bergia.
Sin embargo, también consideró que “no es sencillo pedir a las cooperativas eléctricas hacer este esfuerzo, pero el mismo será también compartido y afrontado por la Empresa SECHEEP, quien habrá de acompañar y esperar para la percepción de los montos que correspondan a la provisión de energía para electrificación rural, por lo que se propone es simplemente una prórroga y un plazo prudencial de espera para hacer exigible el pago del servicio de electrificación rural, dado el complejo escenario que nos encontramos atravesando, en especial en aquellos sectores que evidencian mayor fragilidad y desprotección, como los son las familias que habitan en el campo y subsisten a base de la pequeña producción hogareña” concluyó,