Las actividades se enmarcan en la Agenda 2020 Verano para Todxs que despliega el Gobierno Provincial e integra el programa Patrimonio Activo, que pone en valor los Museos, Centros Culturales y elencos estables del ICCH.
A la muestra fotográfica del museo, que retrata los carnavales históricos del Chaco de 1972 a 1988, se sumará este jueves la muestra de Fundación Resistencianos con fotografías de los corsos resistencianos y fiestas de disfraces, imágenes que presentará el historiador Roly Pérez Beveraggi, evocando los carnavales de ayer.
“Además una dama de los corsos de ayer, Nancy Alegre, pondrá en valor vivencias y recuerdos de su paso por los corsos en la comparsa Pucá Porá. Y el reconocido teatrero y actual director del Complejo Cultural Guido Miranda, Víctor Cardozo, hablará desde la experiencia de jurado en los recientes corsos de General San Martín”, expresaron desde el museo.
El gran cierre estará a cargo de integrantes de la agrupación Los herederos del mate, que harán sus pasos murgueros “para dar carnadura a la alegría y el ímpetu propio del carnaval”, sostuvieron.
“Los carnavales eran épocas – tal su sentido etimológico y espacial lo indica ya que es un tiempo de piedra libre, antes de la llegada de recogimiento de la cuaresma – en que lo dionisíaco, el humor, el descontrol, eran moneda corriente. Basta escuchar los relatos de los mayores donde el pomo, las chupitas, los baldazos desde la terraza al transeúnte desprevenido, formaban parte del folclore. Y las noches, con la magia de las plumas y las lentejuelas; los pasos de baile como tributo a la belleza, desfilaban por calles y avenidas. Hoy, desaparecido ese encantamiento de corsos en la capital chaqueña, subsiste en el interior provincial que resguardó ese rico patrimonio carnestolengo”, agregaron.
Historia carnavalesca
Las fotos expuestas reviven esas noches tanto en Resistencia como en localidades del interior: Sáenz Peña, La Leonesa, Barranqueras y Las Palmas. En ellas se percibe la alegría de participantes y protagonistas, niños disfrazados sobre los autos o princesas de largo en acoplados tirados por tractores; las lentejuelas y los plumajes; las silletas de los vecinos que acercaban con sus conservadoras; las serpentinas, la nieve, los chascarrillos a cada vuelta de esquina, y esas agrupaciones que devinieron clásicos como Maracangala (de Resistencia), El Camaleón (de Barranqueras, Bahía y Maracaibo (de Sáenz Peña), Luz Argentina (de Las Palmas), Ará Berá, (de Corrientes), Imperio Show (Resistencia), entre muchas otras
Las comparsas no se movían en compartimentos estancos, se trasladaban hacia otros corsos, otras localidades, así fue como las aristocráticas Copacabana, Frou Frou, Ara Berá de Corrientes muchas veces mandaron importantes embajadas a Resistencia.