Los pequeños felinos que pronto cumplirán los 6 meses, todavía se siguen alimentando de leche materna. Gozan de buena salud y están en óptimas condiciones al cuidado de Tania, que además también fue madre de la primera camada de cachorros nacidos en los Esteros del Iberá.
Los pequeños jaguares que ya probaron el sabor de la carne, todavía no participaron de la experiencia de procurar su propio alimento. Pero muy pronto recibirán una lección magistral en vivo y en directo, de su poderosa mamá.
Qaramta –el espíritu vivo del monte chaqueño- lleva una vida apacible interesado en la presencia de Isis, otra hembra que lo ‘retiene’ en las inmediaciones con sus feromonas. Aunque no se sabe si ha interactuado a través de la cerca con su prole, que está al exclusivo cuidado de su celosa progenitora.
El biólogo Gerardo Cerón, coordinador de la Fundación Rewilding Argentina, explicó que los cachorros “están creciendo en perfectas condiciones. A partir del sexto mes de vida, que será el 1° de agosto, van a empezar a acompañar a su madre en cacerías de presas vivas. Paso fundamental para su desarrollo y para que puedan valerse por sí mismos cuando sean liberados en el parque”.
También agregó que para llevar adelante el proyecto de recuperación del yaguareté “es necesaria la construcción de nuevos corrales de junta para poder cruzar a otras hembras con Qaramta y obtener nuevas camadas de cachorros con mayor diversidad genética, porque con dos cachorros no recuperamos la población de yaguaretés en la zona”.
Al respecto reconoció que para dar ese importante paso todavía falta recorrer un trecho: el administrativo y el de la construcción de la obra. “El pedido de autorización está hecho ante la Administración de Parques Nacionales, con quienes venimos trabajando mancomunadamente en el proyecto de recuperación del yaguareté, junto al Gobierno Nacional y de la Provincia del Chaco”, concluyó.