La comisaría local se dirigió a realizar una diligencia judicial en un galpón. Pero el hombre se resistió, se arrojó combustible y amenazó con prenderse fuego. Luego subió al techo e intentó arrojarse. El Cuerpo de Operaciones Especiales realiza una maniobra de rescate y evitó lo peor. El hombre de 50 años terminó detenido.
A raíz de un mandamiento judicial que solicitaba el desalojo de un galpón ubicado en el parque industrial de la localidad. En conjunto con representantes de la Fiscalía en turno se dirigieron al lugar.
Una vez allí se entrevistaron con el morador, un hombre de 50 años. Tras informarle sobre la diligencia judicial, éste se puso violento y se negó a que realicen el procedimiento.
En un momento dado el hombre se roció combustible con la intención prenderse fuego a lo que los agentes tomaron distancia y mediante el dialogo intentaron que cambie de opinión. Luego subió al techo del galpón y quiso arrojarse.
Ante esta situación intervino el Cuerpo de Operaciones Especiales, los efectivos subieron y charlaron por varios minutos para que desista, pero no lo hacía, seguía ofuscado y sin intenciones de bajar.
Por ello, iniciaron una maniobra de distracción y rescate. Primeramente, se arrojó una granada tipo flashbang para distraerlo, y luego la reducción sobre el techo, pudieron inmovilizarlo para que no se arroje.
Con la utilización técnicas de rescate y descenso, con escalera y cuerdas lo bajaron a la superficie, allí fue examinado por personal de salud y luego derivado a la comisaría local.
Los efectivos pudieron finalizar el mandamiento judicial. En el procedimiento un empleado policial resultó con lesiones leves.
Paralelamente se instruyeron actuaciones judiciales para el hombre de 50 años en la causa Supuesta lesiones y atentado contra la autoridad y Desobediencia Judicial.