Lesiones internas en órganos vitales, indicios de asfixia por compresión del pecho y quemaduras en la piel por el contacto con la chapa caliente del capó de un patrullero, todos esos puntos se mencionaron durante el juicio por la responsabilidad policial en la muerte de Leandro Bravo el 26 de febrero de 2022.
“Para nosotros, como Comité de Prevención de la Tortura, en este juicio quedó absolutamente demostrado que hubo tortura seguida de muerte”, indicó el presidente de ese organismo, Darío Gómez. Explicó que esa figura es la que definirá la situación de los cuatro agentes de policía procesados y por la que el próximo miércoles se oirán los alegatos de las partes. Además, de existir una condena, el Chaco se convertiría en la primera provincia con una sentencia por “tortura seguida de muerte”.
“Hubo golpes, malos tratos y lo presionaron contra una parte de la camioneta a la siesta, una superficie que en el verano chaqueño alcanza temperaturas elevadísimas, de más de 70 grados”, describe sobre los datos analizados en la Cámara del Crimen de Charata.
Darío Gómez, presidente del Comité de Prevención de la Tortura en el Chaco.
Las marcas
Gómez insiste en un punto que la familia, la querella y otras fuentes allegadas a Bravo vienen repitiendo hace dos años: existe una serie de situaciones que demuestran que Leandro llegó sin vida al hospital. “Los médicos de Sanidad Policial dijeron que estaba desmayado y que por eso no lo atendieron en esa dependencia”, agrega el titular del Comité.
Una vez en la guardia del hospital, en el cuerpo sin vida la familia observó lesiones que no tenía antes la detención.
En una segunda autopsia la querella halló evidencia compatible con la hipótesis de que una secuencia de reiterados malos tratos. En una de las audiencias en la sala de la Cámara de Charata se mencionaron apreciaciones sobre algunas maniobras que provocaron mucho sufrimiento, lo que generaró en Bravo una situación de estrés extremo hasta derivar en un paro cardiorrespiratorio y su deceso.
El fallo
Como se anunció, el próximo miércoles 22 se realizará la próxima audiencia en la que se expondrán los alegatos de las partes.
Por un lado están los defensores de los cuatro imputados; y por otro la querella, compuesta por el Ministerio Público Fiscal, la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Provincia, la familia y del Comité para la Prevención de la Tortura.
A continuación el Tribunal podrá comunicar su fallo después de un receso breve o al cabo de 15 a 30 días. “Lo vamos a saber el mismo miércoles cuando el tribunal de Charata informe su decisión”, dijo Darío Gómez.
Fuente: DiarioNorte