Ayer pasada las 21, el llavero en turno de la Comisaría Segunda realizaba la correspondiente requisa a los alimentos que tenían que ingresar para los detenidos alojados en la Unidad policial.
Allí se presentó un hombre de 39 años al que se le controlo las cosas que quería dejar a un interno y en el alimento los efectivos constataron que llevaba 4,2 gramos de cocaína escondida.
Se hicieron presentes los agentes de la Dirección General de Consumos Problemáticos que realizaron la prueba de campo y pesaje, poniendo en conocimiento de lo sucedido a la Fiscal Antidrogas N° 1, quien determinó que se secuestre el estupefaciente y el hombre de 39 años sea notificado de las actuaciones y prosiga en libertad.
El segundo acontecimiento tuvo lugar a las 05:50 de hoy, cuando los efectivos de la Guardia de Prevención fueron alertados por el operador del servicio de emergencias 911 que en calle Cangallo N° 300 aproximadamente una mujer se encontraba pidiendo auxilio desde el balcón de su domicilio.
Rápidamente los agentes se hicieron presentes al lugar, allí dialogaron con una mujer de 29 años quien informó que su pareja la amenazó con un arma de fuego, la dejo encerrada y se fue del lugar, no pudiendo salir de la vivienda.
Con la urgencia el caso, los efectivos se comunicaron y pusieron en conocimiento de lo que estaba aconteciendo en el lugar al doctor Jorge Omar Caceres Olivera a cargo de la Fiscalía de Genero N° 4, quien ordenó a los agentes que por medio de la fuerza irrumpan en el domicilio.
Por esa razón, los uniformados ejecutaron lo dispuesto por la justicia y pudieron sacar a la mujer que hizo entrega de forma voluntaria de un arma de fuego calibre 22 largo y 47 cartuchos del mismo calibre pertenecientes a su pareja.
Los agentes secuestraron el arma y trasladaron a la mujer a la comisaría donde radico su denuncia en contra de su pareja de 30 años que ahora se encuentra prófugo de la justicia.