Resistencia

RESISTENCIA: Bolatti Y Masin Promueven Iniciativa Que Busca Atenuar El Impacto Negativo Del Estacionamiento Medido

El proyecto de ordenanza se da en el marco de la implementación del Sistema Inteligente de Estacionamiento Medido (SIDEM), y tiene como objetivo: facilitar y promover la actividad comercial y de servicios que se desarrollan dentro de la zona medida, así como generar alternativas para quienes tienen que estacionar sus vehículos por varias horas, o turno completo y en forma diaria, normalmente por razones laborales.

Los ediles indicaron que “la medida oficial recae directamente sobre estos sectores que son principales en la ciudad, ya que por concentrarse en la zona medida gran parte de las oficinas públicas y empresas comerciales y de servicios, como las de compras, se genera una enorme afluencia de personas que requiere adaptar la norma contemplando esta realidad, y no que la realidad se vea fuertemente afectada por malas decisiones tomadas por funcionarios cuya tarea principal es la de atender y dar respuestas a quienes lo eligieron para ello”.

“Queremos generar una estructura tarifaria que sea justa y que permita a todos los sectores de la ciudad seguir desarrollando sus actividades sin la preocupación de que el costo del estacionamiento afectará directamente su productividad o estabilidad económica”, remarcaron Bolatti y Masin, y recordaron que oportunamente acompañaron y trasladaron el reclamo de frentistas sobre quienes recaía sin ninguna mirada especial, la medida que graba el uso del espacio público, logrando que se contemple dicha inquietud por parte del oficialismo.

La fuerte contradicción

Los ediles señalaron que por lógica y sentido común, “los tributos son la consecuencia de la necesidad de contar con recursos que puede requerir la prestación de un servicio o la resolución de un problema comunitario que debe ser atendido por el Estado, y para ello recae sobre la misma comunidad beneficiada la necesidad de tributar. Pero nuestra realidad va a contramano de la lógica y el sentido común, donde es el tributo o la forma de su percepción, la que está generando los problemas que ahora debemos atender y para lo que las y los ciudadanos deben aportar”.

Es decir “se crea la necesidad de recaudar como objetivo en sí mismo, y el ejercicio de esa facultad es la que va generando los inconvenientes a la comunidad, que son nuevamente abordados por la gestión que desarrolla un sistema de tratamiento más organizado de los problemas originados, decidiendo crear mayor capacidad de recaudación al ampliar las zonas y subiendo la tarifa en forma desproporcionada. Quedando más claro aún, que la medida del estacionamiento medido, no aporta en lo más mínimo al ordenamiento de la movilidad urbana, dejando ver sólo la voracidad recaudatoria que viene desplegando la actual gestión, emulando a su antecesor, haciendo crecer el valor de la carga tributaria principal, pero no así la calidad y alcance de los servicios prestados”, resaltaron.  

En ese marco, los concejales marcaron que la iniciativa presentada, no solo responde a la necesidad de flexibilizar el esquema que se pretende aplicar imponiendo costos elevados a quienes requieren estacionar por períodos prolongados en el centro de la ciudad, sino también a la movilidad urbana, buscando garantizar una gestión más eficiente del espacio público y beneficiar tanto a los vecinos y vecinas, como a las actividades económicas de la ciudad.

Otro de los fundamentos del proyecto, fue la actual situación del transporte público, con tarifas cada vez más inaccesibles, que ocasionó que muchas familias dependan del uso de vehículos particulares para poder trasladarse al trabajo, a la escuela y realizar sus actividades cotidianas. “El sistema de transporte público está cada vez más lejos de ser una opción accesible y eficiente, lo que obliga a las familias a recurrir al uso de otros medios de movilidad, generando una sobrecarga en las zonas de estacionamiento”.

En este contexto, indicaron que la propuesta de una estructura tarifaria diferencial y progresiva “no solo apunta a aliviar la carga económica de quienes necesitan estacionar durante largas horas, sino también a promover una mejor distribución del espacio público, favoreciendo la rotación del estacionamiento, la circulación vehicular y la accesibilidad a las áreas más concurridas de la ciudad”.

*El fin no debe ser únicamente recaudatorio

 Bolatti y Masin advirtieron que la implementación del nuevo estacionamiento medido no tuvo en cuenta las distintas realidades de la comunidad y que se trata nuevamente de una decisión arbitraria del Ejecutivo Municipal que sólo busca recaudar. “Consideramos fundamental que este tipo de medidas no tengan un fin netamente recaudatorio, ya que podrían afectar el desenvolvimiento de la actividad cotidiana y con ello la vida comunitaria que se ha generado en el tiempo, lo que seguramente no se justifica en términos económicos, sobre todo cuando los recursos recaudados y recibidos muestran ser suficientes para un normal desempeño de las incumbencias asignadas, lo que deja relucir que se priorizan los intereses personales o sectoriales, por sobre el general”, aseveraron.

Los ediles estiman necesario “que se implementen de manera equilibrada y contemplando las necesidades reales de la comunidad, encontrando un punto de equilibrio que no afecte de más a sectores y permita el desarrollo de la ciudad sin que los costos adicionales impacten aún más la economía de las familias que ya enfrentan una situación difícil, agravada por la crisis nacional y provincial”.

Por último, Bolatti y Masin destacaron que la iniciativa se sustenta “en el compromiso asumido con la comunidad, de generar herramientas que favorezcan a la vida cotidiana de los vecinos y vecinas de la ciudad” y resaltaron que la clave de cualquier política pública debe ser “generar confianza y una relación transparente con la comunidad”.