La tragedia ocurrió durante unas vacaciones familiares en Corrientes, a unos 440 kilómetros de su ciudad natal. Según informaron las autoridades, el pequeño, identificado como Mateo Fernández, se encontraba jugando y pescando en el agua antes de desaparecer.
El hallazgo fue realizado por un grupo de pescadores locales, quienes dieron aviso inmediato a las autoridades. El cuerpo del niño fue trasladado al Hospital Regional de Goya, donde se llevan a cabo los procedimientos de rigor.