Según la denuncia, el hecho ocurrió en el domicilio de la denunciante, donde el hombre, en evidente estado de ebriedad, comenzó a comportarse de manera violenta, causando destrozos dentro de la vivienda. La denunciante explicó que, a pesar de haberse separado de él hace algún tiempo, lo había dejado regresar al hogar debido a que tienen un hijo en común de 18 años. No obstante, tras el incidente, la mujer le solicitó que se retirara de la propiedad, a lo que el hombre se negó.
Ante la situación, solicitó formalmente una orden de exclusión del hogar así como una restricción de acercamiento y acceso al domicilio. En respuesta a la denuncia, se envió al lugar el móvil policial donde se constató la veracidad de los hechos relatados por la denunciante.