Corrientes

CORRIENTES: Vio La Foto De Carlitos González Y Sospecha Que Es Su Novio

El caso de Carlitos González, desaparecido en Corrientes en 1993, podría estar cerca de resolverse tras un inesperado descubrimiento. Una joven de Buenos Aires vio en redes sociales una foto del niño desaparecido que le resultó familiar: era la misma que su novio le había mostrado, afirmando que era él de niño.

Esta coincidencia la llevó a investigar y contactar a personas en Corrientes, incluyendo al padre de Carlitos, Carlos González, quien también cree que el joven podría ser su hijo debido al parecido.

Sin embargo, el novio de la joven se ha mostrado reacio a realizarse una prueba de ADN, generando tensiones en la pareja. La joven señala inconsistencias en la historia de infancia de su novio y menciona que nunca conoció a la familia de él, excepto a una hermana. 

A pesar de su resistencia, la familia de Carlitos mantiene la esperanza de confirmar su identidad a través de una prueba genética.

El caso de Carlitos es uno de los muchos que Missing Children Argentina maneja, subrayando la importancia del ADN en la identificación de personas desaparecidas. Aunque la justicia es la que determina los pasos a seguir, una negativa a realizarse una prueba de ADN puede complicar la resolución de estos casos. Carlos González, el padre de Carlitos, sigue esperando una confirmación y mantiene la esperanza de reencontrarse con su hijo.

El caso Carlitos González

Carlitos tenía dos años cuando desapareció el 26 de diciembre de 1993 durante una fiesta de cumpleaños al que había ido acompañado solamente por su tía. “Él había salido a jugar a la pelota con otros chicos a unos 50 metros del lugar en donde estaban los adultos”, contó a este medio su papá, sobre aquel día que cambió su vida para siempre.

La dramática noticia de la desaparición del nene empezó a correr de boca en boca casi tan rápido como la versión de un auto rojo sospechoso que había sido visto en la zona rural donde se llevó a cabo la reunión familiar.

Con el correr de las horas, lejos de desdibujarse, la pista del misterioso vehículo fue cobrando cada vez más fuerza. “Ese coche tuvo un accidente menor frente a una cancha de fútbol, se cayó en una cuneta”, apuntó el padre de Carlitos.

Entonces, las personas que en ese momento se encontraban disputando un partido en esa cancha se convirtieron inesperadamente en testigos clave del caso de su hijo.”Ellos vieron que llevaba a un chiquito adentro del auto. El nene lloraba, pero no sabían que era Carlitos, tenía la misma ropa”, resaltó González, haciendo referencia a lo que oportunamente declararon en la Justicia.

El auto rojo siguió su marcha aquel día y recién tres semanas después de que Carlitos se perdiera, la investigación se inclinó hacia un secuestro y la posibilidad de que la víctima ya no estuviera en el país. Nunca, sin embargo, hubo un pedido de rescate. Los días se convirtieron en meses, después en años y en décadas, pero Carlos González nunca dejó de buscarlo.

Con información de TN