Las áreas rojas, las más susceptibles, enmarcaban a Jujuy, el oeste salteño, Tucumán, La Rioja, Catamarca, San Juan, Mendoza, San Luis, el este de Santiago del Estero, el noreste de Córdoba y un sector del noreste de La Pampa.
La zona declarada amarilla, de menor riesgo, quedó compuesta por el este de Salta, el noreste de Formosa, al igual que Chaco y el centro-este de Santiago del Estero. El informe técnico preventivo emitido por la cartera ambiental destaca que sobre la zona bajo alerta roja las condiciones de peligro de incendio se mantendrán elevadas y con posibilidades del viento Zonda.
Las regiones enmarcadas bajo alerta (roja o amarilla) presentan “condiciones que implican dificultad de control de un posible foco ígneo, y una mayor duración y desarrollo veloz del mismo, lo que exige que la planificación del trabajo y de la seguridad requiera características específicas”, explicó el Ministerio en un comunicado.