y “Que la pandemia sacará lo mejor y también lo peor de nosotros, lo escuchamos desde hace más de cuatro meses. Y la realidad nos demuestra que sí”.
Nadie desconoce que los efectos de la pandemia ha sobrecargado los sistemas de atención médica en las provincias que registran casos de Covid-19, particularmente en nuestro Chaco donde el número de contagios arroja guarismos alarmantes, independientemente de las políticas de Estado llevadas a cabo con el objeto de mitigar y frenar la expansión de éste flagelo. A la fecha se registran 1883 infectados y 94 decesos, con una crecimiento exponencial de contagios de acuerdo a los datos aportados desde el Ministerio de Salud de la Nación.
Dado este panorama, y habiendo transcurrido más de cien días de cuarentena, el pueblo chaqueño, pese a adoptar medidas de prevención, higiene, seguridad, estar lejos de sus seres queridos y registrar enormes pérdidas económicas y de puestos de trabajo, debe sumar el desconcierto e intranquilidad que ocasiona un gobierno que se ha reconocido incapaz, “sin saber que hacer”.
Ante esa circunstancia la dirigencia política toda debe actuar con extrema responsabilidad en cada acción que se lleve a cabo, en cada palabra que se exprese. Decir entonces “que se utiliza la presente situación para sacar ventaja política socavando al oficialismo” habla más de quien lo dice que de quien se señala.
Por estas horas el pueblo no espera defensas partidarias al unísono, sino acciones responsables. Necesita que le digan que, entre todos, aunque pensamos distinto, estamos juntos, haciendo el mayor esfuerzo por cuidarlos, también a través de la crítica, porque si se sabe escuchar se puede mejorar, la soberbia es siempre la peor consejera.
Desde el día cero de la pandemia hemos estado asistiendo a distintas familias, comedores, centros de salud, siempre abiertos al diálogo con todos los sectores, acompañando las iniciativas que el gobernador envió a la Cámara de Diputados relacionadas a la pandemia, trabajando en otras, concurriendo a sus convocatorias, porque dimensionamos lo que esta situación significa en el presente y a futuro. Y vamos a seguir estando y marcando lo que creemos que se puede mejorar, mal que le pese a quienes confunden idea superadora con “socavamiento”.
Todos los gobiernos tienen errores y aciertos. No es momento de hacer política, somos conscientes que para construir es necesario robustecer los pilares de la participación, solidaridad, igualdad, consenso, tolerancia y valoración aun en el disenso. Más aún para superar el fuerte impacto que dejará la pandemia en nuestra sociedad.
Coincido con los dichos de la intendenta Ayala respecto de que hoy, lejos de ser obsecuentes, debemos ser críticos y constructivos. Pues entonces debería ir más allá de la palabra y ponerlo en práctica, por el bien de nuestro pueblo.
En todos los órdenes de la vida las situaciones extremas sacan lo mejor de mí, y esta no es la excepción. Por todo ello, siempre comprometida con mi comunidad y consciente de que más allá de las ideologías y/o banderías políticas lo que interesa es el bien común, estaré siempre a disposición para trabajar por un Chaco mejor”.